Sistema Mulmico®  ·  Eliminación de Humedades y Filtraciones

El Sistema Mulmico® (patentado) es el único del mercado que quita y no oculta el agua que satura el subsuelo. Este sistema es utilizado tanto para el tratamiento como para la eliminación de humedades y filtraciones en sótanos, garajes, edificios y viviendas. Se puede implantar en todo tipo de construcciones y su aplicación es inmejorable en rehabilitaciones.

Gracias al Sistema Mulmico podemos resolver humedades en general provenientes del subsuelo. Resolvemos humedades y filtraciones ya sea en garajes o sótanos, inundaciones en fosos de ascensores, así como filtraciones de agua en muros y soleras.

• Eliminación de humedades.
• Eliminación de filtraciones.
• Tratamiento para combatir la degradación y fatiga de materiales y cimientos.
• Tratamiento de asientos diferenciales.

Se trata de una técnica utilizada para estabilizar, consolidar y tratar suelos, el cual tiene múltiples aplicaciones en los sectores de la edificación y obra civil con procesos cuidadosos con el medioambiente.

En el tratamiento de humedades, el 98% de los sistemas existentes no eliminan el agua y son simples actuaciones parciales o de ocultación de los daños producidos. El Sistema Mulmico ofrece un altísimo rendimiento, siendo el único en el mercado que la elimina.

Realizar un buen diagnóstico es fundamental para la eliminación de las humedades, pero en el fondo, el diagnóstico será la acción del agua. El agua es la enfermedad y los sistemas paliativos no la eliminan, sólo la ocultan, requiriendo actuaciones periódicas posteriores y mantenimientos. Nuestro sistema en cambio no la oculta, sino que la elimina.

No olvide que las impermeabilizaciones tienen una vigencia y durabilidad. Por medio del Sistema Mulmico podemos ofrecerle una solución definitiva a cualquier problema de humedad.

Qué es el Sistema Mulmico

El sistema patentado Mulmico consiste en la inserción en el subsuelo de unos filtros capaces de captar, confinar y canalizar el agua subterránea y eliminarla, dando como resultado la paralización de raíz y definitiva de todo proceso patológico provocado por el agua.

La implantación en el subsuelo de estos micro-filtros debe ser la correcta en cuanto a cantidad, distribución, tipo, etc..., para conseguir capturar el agua que afecta a la edificación y eliminar el problema de raíz. ¡Si no hay agua no hay humedad!

Mulmico en Rehabilitación y Restauración

El Sistema Mulmico además ofrece soluciones extraordinarias en Rehabilitación y Restauración de Edificaciones.

La acción integral del sistema, y su forma de aplicación, hará innecesarias medidas como el levantado de pavimentos o soleras o la apertura de zanjas para labores de drenaje e impermeabilización de muros. Se podrán conservar los cimientos y se mejorará la calidad del suelo portante, y todo ello sin tener que llevar a cabo operaciones traumáticas, sin necesidad de cortar muros para implantar barreras a la humedad, ni de destruir o sustituir lo que queremos conservar.

Permite ser implantado bajo la cimentación, entre pilotes o zapatas, creando un drenaje o tratamiento de base, incluso en edificios ya construidos y entre medianeros. Así, al ser una técnica que actúa bajo los edificios, la convierte en única e insustituible en el sector de la rehabilitación.

Patología en Edificación

Una edificación que esté asentada o implantada en un terreno donde no exista agua, no sufrirá ninguna patología provocada por este elemento. Esto que parece obvio, resulta, en la práctica, irreal, pues todos los edificios se asientan sobre la superficie o bajo ella, pero sus cimientos inciden en el subsuelo y éste, a su vez, esta expuesto a numerosas causas u orígenes para que el agua pueda existir y fluir libremente por él (niveles freáticos, acuíferos colgados, infiltraciones de lluvia, rotura de redes de abastecimiento y/o saneamiento, etc...).

Existen numerosos problemas que se engloban dentro de la patología en edificación:

• Grietas
• Humedades por capilaridad
• Sobrepresión en el trasdós
• Subpresión
• Filtraciones en el interior
• Arrastre y lavado de finos (falta de suelo)
• Asientos diferenciales
• Degradación de materiales
• Reblandecimiento y pérdida de resistencia de los materiales
• Inundación de fosos
• Desestabilización del suelo

Trasvase de flujo

Existen numerosos problemas en edificación motivados por la incidencia de obras subterráneas que se realizan para aprovechar al máximo el espacio edificable y que, al incidir en el subsuelo, provocan desequilibrios en el mismo, motivando afecciones hidrogeológicas por la modificación de los regímenes someros y profundos. Estos desequilibrios pueden producir serios daños a edificaciones ya existentes, al modificar el suelo sobre el que se asientan.

Las alteraciones que sufren los flujos subterráneos, asociadas a la ejecución de grandes excavaciones para la construcción de obras enterradas, como pueden ser aparcamientos subterráneos, túneles, suburbanos, etc..., afectan a los mismos ya que son interceptados, bien en su totalidad o parcialmente. Debido a ello es frecuente la aparición de problemas en edificaciones próximas a las nuevas obras, bien por la modificación de niveles freáticos o por presiones a la altura de las cimentaciones, empujes adicionales en los trasdosados, afluencia de agua hacia las propias excavaciones o por la propia modificación de las condiciones de capacidad portante del terreno sobre el que se asientan.

En todo subsuelo existen vías preferentes del flujo subterráneo susceptibles de ser alteradas por estas construcciones subterráneas. Sobre todo en aquellos terrenos donde alternan terrenos granulares (gravas), limitados por terrenos de granulometría inferior, Es decir, en el subsuelo se producen verdaderos avenamientos de agua con caudales elevados y velocidad determinada por su gradiente.

El Sistema Mulmico permite producir un efecto de permeabilidad en la edificación para que ésta no ocasione una retención del flujo e intentar mantener las mismas características hidrodinámicas del acuífero natural para que éste no sufra variaciones de velocidad, gradiente y sección.

Tratamiento de terrenos por Lavado de Finos

La presencia de un flujo de agua con velocidad elevada a causa de un fuerte gradiente hidráulico produce arrastres de elementos finos y, como consecuencia, socavaciones peligrosas, descalces y asientos diferenciales. La solución hasta hoy para solventar este tipo de problemas en edificación ha consistido en la reposición del terreno perdido mediante la inyección de bentonita-cemento. Pero en muchos casos el problema ha vuelto a reproducirse al no haber controlado el agente agresor, "El Agua".

El Sistema Mulmico permite capturar, confinar y encauzar el agua de forma controlada evitando que ésta vuelva a provocar el descalce del terreno tratado por la inyección.

Tratamiento de Terrenos Kársticos

En terrenos kársticos (yesos, margas yesíferas, etc...). El agua origina procesos de disolución de manera que ante la existencia de un determinado gradiente hidráulico se produce un flujo con gran cantidad de material disuelto. Esto provoca la pérdida acelerada de una gran cantidad de masa en el suelo originando huecos y cavidades que, a su vez, permiten la circulación de mayores volúmenes de agua, aumentando la cantidad total de material disuelto. Es pues un proceso de karstificación progresivo. El proceso, finalmente, puede originar el colapso del terreno sometido a las cargas propias del edificio, produciéndose hundimientos puntualesbajo la cimentación.

El Sistema Mulmico no tiene ninguna dificultad en interceptar las numerosas oquedades que en este tipo de terreno se producen, y su efecto de mallazo le hace imprescindible para la solución óptima de estos casos, permitiendo restablecer la masa perdida, y simultáneamente mantener drenado el terreno. Para que este daño no pueda reproducirse.

Fatiga y Deterioro de Materiales de Construcción

Hay que tener en cuenta que, al hidratarse, los materiales constructivos se ablandan y pierden resistencia, pudiendo sufrir aplastamientos o agrietamientos.

Gracias al Sistema Mulmico, al no producirse variación del estado seco a húmedo o viceversa, no se altera el coeficiente de entumecimiento de los materiales (dilataciones o retracciones), y por tanto queda suprimida la fatiga de los mismos.

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